Guía completa para crear una rutina de limpieza para la piel propensa al acné
1. Comprender tu piel
Antes de entrar en la rutina de limpiezadebemos comprender los factores desencadenantes del acné. El acné se produce cuando los poros de la piel se obstruyen con exceso de sebo, células cutáneas muertas y bacterias. Todos tenemos bacterias en la piel, pero en las personas con acné estas bacterias provocan inflamación, dando lugar a granos, espinillas y otras formas de acné. Averigüemos cómo identificar tu tipo de piel.
Identifica tu tipo de piel
Hay cinco tipos básicos de piel: normal, seca, grasa, mixta y sensible. Para determinar qué tipo de piel tienes, observa cómo se comporta sin maquillaje a lo largo del día. La piel normal no es ni demasiado seca ni demasiado grasa. La piel seca, en cambio, puede parecer tirante y escamosa. La piel grasa produce un exceso de sebo, mientras que la piel mixta puede ser seca en algunas zonas y grasa en otras. Por último, la piel sensible se irrita o inflama con facilidad. De este modo, descubrirás los productos adecuados y crearás una rutina que se adapte a tus necesidades.
2. Selecciona los productos adecuados
Limpieza
La limpieza es el primer paso de una rutina de cuidado de la piel. Opta por productos suaves que no irriten la piel. Si tienes la piel grasa o propensa al acné, elige uno que contenga ácido salicílico o peróxido de benzoilo, que son ingredientes clave para combatir el acné.
Exfoliación
La exfoliación elimina las células muertas de la piel que obstruyen los poros. Requiere moderación, ya que una exfoliación excesiva puede irritar la piel y empeorar el acné. Por tanto, si tu piel es sensible o acneica, exfóliala sólo una o dos veces por semana y utiliza un exfoliante suave.
Tratamiento
El tratamiento del acné varía según la gravedad de la afección. Los productos de venta libre que contienen peróxido de benzoilo o ácido salicílico suelen ser eficaces. Si el acné es grave, consulta a un dermatólogo y obtén un tratamiento más fuerte.
Hidratante
Incluso las pieles grasas necesitan hidratación. La clave es elegir una crema hidratante no comedogénica que no obstruya los poros.
Preguntas más frecuentes
1) ¿Cuándo aparecerán los resultados?
Depende de la gravedad del acné y de cómo reaccione la piel al tratamiento. Por lo general, se tarda entre seis y ocho semanas en observar una mejora significativa.
2. ¿Puedo maquillarme si tengo acné?
Puedes, pero elige productos no comedogénicos y desmaquíllate completamente antes de acostarte.
3. ¿Qué alimentos debo evitar?
Aunque la relación entre la dieta y el acné no está totalmente establecida, algunas investigaciones sugieren que los alimentos ricos en azúcar y los productos lácteos pueden contribuir al acné.
4. ¿El estrés intensifica el acné?
Sí, puede desencadenar brotes de acné.
5. ¿Debo ir al dermatólogo?
Si tu acné es grave o si los productos de venta libre no funcionan, entonces es el momento ideal para consultar a un dermatólogo.
6. ¿Puedo curar el acné para siempre?
El acné puede controlarse con el tratamiento y la rutina adecuados, pero puede que no se cure del todo, dependiendo de la causa subyacente.
Conclusión
Preparar una rutina para la piel propensa al acné es todo un reto, pero con esta guía tendrás todas las herramientas que necesitas para empezar. Recuerda que la constancia es el éxito. Puede que la piel no cambie de la noche a la mañana, pero con los cuidados adecuados y tiempo, verás una mejora.